El Frente Polisario presenta su propuesta ampliada a la ONU en un momento crucial para la descolonización del Sáhara Occidental.Por:Esteban Silva Cuadra.

El Frente Polisario presenta su propuesta ampliada a la ONU en un momento crucial para la descolonización del Sáhara Occidental. Por:Esteban Silva Cuadra.
En un movimiento diplomático estratégico, el presidente de la República Árabe Saharaui Democrática, Brahim Ghali y secretario general del Frente Polisario, ha remitido una carta al Secretario General de la ONU, António Guterres, conteniendo lo que describe como la «propuesta ampliada» para resolver el conflicto del Sáhara Occidental, que es un conflicto de descolonización pendiente justo cuando el Consejo de Seguridad se prepara para renovar el mandato de la MINURSO.
La comunicación, fechada el lunes 21 de octubre, llega en un momento particularmente sensible, con el mandato de una fracasada Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental (MINURSO) programado para expirar el próximo 31 de octubre. El Frente Polisario describió el gesto como una respuesta de «buena voluntad» a las resoluciones del Consejo de Seguridad, que han subrayado la importancia de que ambas partes «amplíen sus posiciones» para promover una solución.
Contenido de la Propuesta Ampliada
La propuesta presentada por el presidente Brahim Ghali reitera la posición central del Frente Polisario como movimiento de liberación nacional saharaui y a la vez introduce elementos de flexibilidad en el marco de la búsqueda de una solución pacífica.
La iniciativa tiene por objeto alcanzar una «solución política mutuamente aceptable que prevea la libre determinación del pueblo del Sáhara Occidental». El mecanismo propuesto para ello es concretar finalmente la celebración del referéndum de autodeterminación saharaui (acordado en el marco de la ONU y para la cual fue creada la MINURSO) supervisado por las Naciones Unidas y la Unión Africana.
El Polisario expresa su disposición a «entablar negociaciones directas y serias con el Reino de Marruecos, de buena fe y sin condiciones previas», bajo los auspicios de las Naciones Unidas. La declaración reafirma la disposición del Frente Polisario en busca de reanudar el proceso de descolonización de un cese al fuego y de negociaciones de paz.
En un gesto significativo, la carta transmite la voluntad del «Estado Saharaui» de negociar con Marruecos el «establecimiento de relaciones estratégicas y mutuamente beneficiosas entre los dos países», una vez alcanzada una solución.
La propuesta se fundamenta en la Carta de las Naciones Unidas, el derecho internacional y las resoluciones del Consejo de Seguridad, reafirmando el carácter de descolonización del Sáhara Occidental.
Una Carrera Contra el Tiempo en el Consejo de Seguridad
La presentación de esta propuesta no es un hecho aislado, sino que ocurre en medio de una intensa actividad diplomática en Nueva York.
En paralelo, la administración de Donald Trump está impulsando agresivamente un proyecto de resolución en el Consejo de Seguridad (hasta ahora se trata de un non paper) que representaría un cambio radical en el enfoque de la ONU. El borrador, respaldado por la Francia de Macron estrecho aliado del monarca marroquí, afirma que la «autonomía genuina bajo la soberanía marroquí es la solución más viable» y busca establecer el plan de autonomía de Marruecos como el «único marco» para las negociaciones. Es decir busca legitimar la ocupación colonial e ilegal de Marruecos en el territorio que pertenece al pueblo saharaui.
La iniciativa estadounidense, que «acoge con satisfacción el liderazgo del presidente Trump», parece orientada a imponer un supuesto acuerdo rápido que pueda ser presentado, al igual como fue presentado el cese al fuego temporal en Gaza, como un supuesto triunfo diplomático de Donald Trump. El borrador propone renovar el mandato de la MINURSO por sólo 90 días –hasta el 31 de enero de 2026–, un plazo inusualmente corto que aumenta la presión sobre las partes.
Estas movidas dejan al descubierto la profunda fractura en el enfoque del conflicto. Mientras el Frente Polisario como único representante de la nación saharaui insiste en el derecho a la autodeterminación en independencia mediante un referéndum, la propuesta estadounidense intenta imponerle a la desprestigiada e inoperante ONU por la vía del Consejo de Seguridad la posición del régimen de Marruecos, que defiende la ocupación ilegal del Sáhara Occidental esgrimiendo un plan de autonomía presentado el 2007 como la «única solución viable».
Un Momento Decisivo:
La presentación de la «propuesta ampliada» del Polisario es un movimiento calculado en un contexto de creciente presión internacional. Al mostrar una postura abierta al diálogo y a la construcción de relaciones futuras, el Frente Polisario busca contrarrestar la narrativa marroquí y estadounidense (ambos estrechos aliados del sionista Israel de Netanyahu) que busca imponer y presentar desde los medios de comunicación occidentales al Frente Polisario como un actor intransigente. Recientemente Marruecos ha financiado a muchos lobbistas, políticos y parlamentarios dilapidando millonarias sumas de dólares en los Estados Unidos y en los Parlamentos de Europa y de América Latina y el Caribe montando una millonaria campaña internacional contra el Frente Polisario intentando, sin éxito ninguno, presionar a la administración de Trump para que clasificase al movimiento de liberación nacional saharaui como una «organización terrorista».
Sin embargo, el destino de esta operación de la monarquía marroquí (crecientemente rechazada por millones de marroquíes movilizados) y el camino que tomará el proceso de descolonización y de paz frente a la actual guerra que se libra entre el ejército de Marruecos y el Ejército de Liberación popular Saharaui (conflicto que los grandes medios hegemónicos siguen tratando de ocultar) probablemente se decidirá en los próximos días en el seno del Consejo de Seguridad. La renovación del mandato de la MINURSO y el lenguaje que finalmente adopte la resolución determinarán si el Consejo de Seguridad de la ONU mantiene el principio de autodeterminación como piedra angular de la solución de acuerdo a la vigente Resolución 1514 de la Asamblea General y a las Resoluciones sobre el Sáhara Occidental de la propia Unión Africana de la cual la República Árabe Saharaui Democrática y Marruecos son integrantes o si da un giro histórico hacia la imposición de una nueva lógica neocolonial apoyando el plan de autonomía marroquí como única vía para un imposible acuerdo al excluir al pueblo saharaui.
El conflicto del Sáhara Occidental, la última colonia en África pendiente de descolonización, se enfrenta a una de las encrucijadas más determinantes de su historia reciente.
La República Árabe Saharaui Democrática es reconocida por más de 86 Estados en el mundo, es integrante fundadora y plena de la Unión Africana y en los países con los cuales la RASD no tiene relaciones diplomáticas el Frente Polisario si tiene relaciones con partidos y movimientos políticos soberanistas y progresistas, con organizaciones y confederaciones de Trabajadores y de estudiantes, y con amplios movimientos sociales y populares en todos los continentes.
Al igual que el pueblo Palestino que resiste una ocupación colonial de su territorio el pueblo saharaui sigue resistiendo la ocupación colonial e ilegal de su territorio ocupando todas las formas de lucha para resistir y asegurar la independencia del Sáhara Occidental. La propuesta del Frente Polisario enviada al secretario General de la ONU es una reiteración de la sólida voluntad que tiene el pueblo saharaui de alcanzar la independencia y asegurar la soberanía del Sáhara Occidental y poner termino a la guerra para construir la paz con justicia en el África.
Infosurglobal
21 de octubre de 2025