Los 60 años de un grande de nuestra historia,Jorge González. Por Juan Francisco Torres
Intelectuales y artistas chilenos critican política exterior de Boric por su alineamiento con EEUU y las derechas.
En Declaración pública la Red de Intelectuales y artistas chilenos en defensa de la Humanidad hizo pública una dura crítica a la política exterior del gobierno del presidente Gabriel Boric por su alineamiento con EEUU y con las derechas en la región.➡️
LA POLÍTICA EXTERIOR DE BORIC CADA VEZ MÁS ALINEADA CON EEUU Y LAS DERECHAS DE LA REGIÓN
El Capítulo Chile de la Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad (REDH), toma nota con profundo desagrado de las injerencistas y destempladas declaraciones del actual Presidente de Chile, Sr. Gabriel Boric Font, en relación con el fallo de la sala electoral del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, la cual basándose en el juicio de expertos que examinaron las actas, validó los resultados que entregara el 28 de julio el Consejo Nacional Electoral y que ratifican el triunfo de Nicolás Maduro como presidente de la República Bolivariana de Venezuela.
Dichas declaraciones ya no sorprenden, corresponden a una deriva reaccionaria y pro-imperialista que el actual gobierno chileno ha venido adoptando en materia de política exterior, superando incluso a los gobiernos de la fenecida Concertación y a los gobiernos derechistas de Sebastián Piñera.
El gobierno de Gabriel Boric -subordinándose a los intereses imperialistas de Estados Unidos en la región-, pareciera que busca resucitar el desprestigiado Club de Lima, integrado por un conjunto limitado de países cuyos gobiernos derechistas son más que cuestionables bajo cualquier estándar democrático. Por tanto, cabe preguntarse ¿Con qué calidad moral esos gobiernos se inmiscuyen en los asuntos propios de Venezuela y pretenden arrogarse funciones y atribuciones que no se corresponden con cualquier principio del derecho internacional?
Repiten sin prueba alguna el mantra del fraude electoral, inventado por la derrotada y fracasada ultraderecha venezolana. Peor aún, Boric se les adelantó y lo afirmó apenas se dieron a conocer los resultados. Sabe muy bien que el sistema electoral electrónico venezolano es uno de los más confiables del mundo. A pesar de ello, insiste en desconocer sus resultados.
El Tribunal Supremo de Justicia en el marco del recurso contencioso electoral hizo una auditoría a todo el proceso. Se citó a todos los candidatos, todos concurrieron menos el perdedor Edmundo González. Sus partidarios fueron incapaces de suministrar prueba alguna del supuesto fraude. Entonces las acusaciones del nuevo Club de Lima se caen por sí solas. ¡No tienen pruebas pero tienen convicciones!, tal cual afirmaba el juez Moro al condenar injustamente al Presidente Lula y tenerlo preso por más de un año sin prueba alguna del supuesto delito.
Boric no puede arrogarse el papel de defensor de los derechos humanos, es en realidad un vasallo de las políticas imperialistas. Prueba de ello, es su apoyo al gobierno del ucronazi Volodimir Zelenski, cuyo mandato expiró en mayo pasado. Su más que tibia posición frente al brutal genocidio en Palestina, al no romper relaciones diplomáticas con Israel. Su silencio vergonzoso frente a las monarquías árabes ya sea las del reino de Marruecos usurpador del territorio Saharaui, así como con las monarquías árabes del golfo pérsico. Hace poco realizó una gira de negocios a los Emiratos Árabes donde no se pronunció acerca de la total ausencia de democracia ni sobre los derechos pisoteados de las mujeres. Allí no repitió su manoseada frase de “condeno las violaciones a los derechos humanos sin importar la ideología del gobierno”.
La democracia sólo le preocupa cuando se trata de procesos antiimperialistas. En especial, con relación al proceso bolivariano de Venezuela. Entonces, este Presidente frunce el ceño, emplea un tono más grave y eleva el tono de su voz. Toda una actuación para prodigar sermones sobre democracia y derechos humanos en el exterior, mientras que Chile exhibe enormes déficits en ambas materias.
Llamamos al gobierno a rectificar tan nefasta política de alineamiento con EEUU y con los gobiernos más derechistas y espurios de la región. Uno de los principios básicos de la convivencia internacional es el respeto a la libre autodeterminación de los pueblos, el cual debe ser respetado para todas las naciones sin excepción alguna. Chile debe actuar en el marco de los organismos internacionales legítimos, particularmente la ONU, sin plegarse a la política injerencista norteamericana, que tanto daño le ha hecho a la humanidad. Más aún, debería centrar sus esfuerzos en los serios problemas que enfrenta Chile en todo orden de cosas, la delincuencia, la corrupción, las violaciones a los derechos humanos en nuestro país, preocuparse por mejorar la gestión de su gobierno e intentar llevar a adelante las prometidas reformas. De lo contrario, el próximo gobierno estará en manos de una derecha cada vez más reaccionaria y antipatriótica.
Santiago de Chile, 24 de agosto de 2024
Prensa Infosurglobal
25 de agosto 2024.